La misteriosa desaparición de una niña pensilvana de 23 meses, según su padre, en un vehículo de transporte compartido sigue sumando incógnitas. Paul Johnson, el padre de la pequeña Nalani, acusó a la conductora Sharena Nancy de robar a la bebé. Desde la cárcel Nancy dijo que Johnson había usado su servicio para vender a la menor por 10.000 dólares.
El auto en el que Paul, su hija Nalani y un amigo se subieron tenía las identificaciones de Uber y Lyft, según dijo el propio Johnson. En su versión de los hechos, cuando se bajó del vehículo, la conductora arrancó rápidamente y a él no le dio tiempo de sacar a su hija. El hombre asegura haber llamado varias veces a y, al no hallar respuesta, se puso en contacto con el servicio de emergencias.
La policía arrestó a Nancy, de 25 años, dos horas y media después. Ya bajo custodia, la mujer dijo a la policía del condado de Allegheny que Paul había vendido a su hija por 10.000 dólares a una mujer desconocida. De hecho, afirmó que ella misma había llevado a la pequeña al lugar donde se encontraba la supuesta compradora.
De acuerdo con la historia de la conductora, Johnson le mostró una foto de la mujer que iba a recoger a la niña y le dio las indicaciones necesarias para que se encontrara con ella a 20 minutos de una estación de servicio de Monroeville. Al llegar al lugar, según dijo la detenida a los detectives, le dio la niña y la silla del carro a una mujer que manejaba una camioneta gris.
Nancy fue acusada de secuestrar a una menor, de interferir con la custodia de la niña y de ocultar su paradero. La acusada tendrá su audiencia preliminar el 16 de septiembre. La niña sigue en paradero desconocido y las autoridades informan que mide aproximadamente tres pies, pesa unas 30 libras, tiene cabello negro y ojos marrones.