Los escuálidos están diciendo por ahí que me estoy muriendo
El presidente venezolano anda nerviosos. Ya no puede ocultar su enfermedad, sabe que son muchos los que sólo aguardan un momento de vacilación, para saltarle al cuello y se aferra al poder.
Hugo Chávez ha vuelto a desmentir este 22 de noviembre de 2011 los rumores de que se esté «muriendo» a consecuencia del cáncer que le diagnosticaron el pasado junio en Cuba. Chávez asegura que la última revisión médica revela que su estado de salud es «inmejorable».
El líder bolivariano compartió parte de los resultados de los análisis clínicos a través de un contacto telefónico, durante el lanzamiento de la Ley de Costos y Precios Justos.
«Esto me llena de coraje y ánimo para seguir adelante con la recuperación y la disciplina que llevo».
El Gorila Rojo venezolano, de 57 años, se ha sometido a cuatro sesiones de quimioterapia, después de que le operaran en La Habana para extirparle un tumor, cuya localización no ha sido aún precisada.
Hermetismo
El hermetismo que hubo en un principio en torno a su enfermedad desató una ola de rumores sobre la gravedad del mandatario, que nunca se apartó completamente de sus funciones.
«Los escuálidos están diciendo por ahí que me estoy muriendo».
«Los opositores están con ese odio, pero por encima de ello está el amor del pueblo, el amor de Dios y las ganas de vivir y vivir, para que el pueblo cada día tenga más vida».
