Los trabajadores de la Embajada de Venezuela chavista están perplejos ante las mentiras de sus líderes. Mientras que el embajador bolivariano Mario Isea afirmó que el impago por meses de sus empleados está impulsado por las sanciones y bloqueos “del imperio y los traidores de la patria”, ahora sus funcionarios observan cómo sí hay recursos para que Jorge Rodríguez, ministro del Poder Popular para la Comunicación e Información, y toda su delegación se hospeden en el costoso hotel Villa Magna de Madrid.
“Es indignante cómo todo lo que hacen sólo les beneficia a ellos. Nosotros estuvimos casi medio año sin cobrar, se pusieron al día y ahora se están empezando a retrasar de nuevo. No tenemos expectativas de cobrar, pero ellos sí se gastan un dineral en hospedajes elitescos como el Villa Magna”, afirma en exclusiva un trabajador de la Embajada a Periodista Digital América.
Los funcionarios chavistas están en Madrid para participar en la Cumbre de Clima de Naciones Unidas, conocida como COP25, pero también para formar parte de actos y reuniones de la Embajada de Venezuela, muchas estratégicas de cara a una posible llegada de Pablo Iglesias al gobierno de España.
Aunque el Hotel Villa Magna no ha confirmado ni desmentido a este diario la presencia de la comitiva chavista, los funcionarios de la Embajada destacan que que “acá hay dinero sólo para lo que interesa y para los de siempre”, una crítica que vienen realizando durante todo el año con otros polémicos pagos como han sido las vacaciones de Mario Isea y la contratación de Juancho Santana, el portavoz de Izquierda Unida (IU) en el Ayuntamiento de Majadahonda (Madrid), quien “cobra directamente desde Presidencia”.