La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, cuenta con un histórico resentimiento contra las clases pudientes. Al punto que lleva a acusarles de cualquier mal que se le ocurra. Así quedó reflejado cuando, en el cargo de presidenta, afirmó que: «La diabetes es una enfermedad de gente de alto poder adquisitivo porque son sedentarios y comen mucho». Así lo indicó durante la presentación del ‘Plan Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación’ de 2013 en la Casa Rosada.
Obviando que los dos tipos de diabetes predominantes están provocados en mayor o en menor medida por un fuerte factor hereditario, Kirchner argumenta su mensaje en que «hay 80 millones de diabéticos en el mundo que además tienen alto poder adquisitivo». Es importante recordar que justamente ese mismo año su amigo y ahora protegido Evo Morales afirmó que la cocaína era efectiva para el tratamiento de la diabetes, unas desafortunadas declaraciones que realizó ante la Comisión de Estupefacientes de la ONU.
Ahora, las declaraciones de Cristina Fernández de Kirchner vuelven a salir a la luz ya que los argentinos prevén un regreso de las peores crisis económicas del país, pero con la tranquilidad que, según la idea científica de la vicepresidenta, los pobres estarán libres de diabetes.