Algunos de los artículos de la nueva ley declaran la guerra a las fórmulas lácteas y al biberón, como si del cigarrillo se tratara
No hay papel higiénico para limpiarse el trasero, escasean los alimentos básicos en los supermercados, racionan hasta la gasiolina, pero el Gobierno chavista quiere meterse en todo.
Y fiel a su naturaleza, ha decidido que el amor maternal es un asunto de Estado en Venezuela y pasará a estar legislado si la Asamblea Nacional aprueba la reforma de la Ley de Protección, Promoción y Apoyo de la Lactancia Materna, proyecto que empezará a discutir el próximo martes en el pleno.
La Asamblea Nacional (AN) discutirá el próximo martes 18 la reforma de la Ley de Protección, Promoción y Apoyo a la Lactancia Materna que, entre otras cosas, busca prohibir el uso de biberones y teteros salvo casos excepcionales en los que la mamá, por algún tipo de enfermedad, no pueda amamantar.
En una entrevista en el programa Toda Venezuela, que transmite Venezolana de Televisión, la diputada Odalis Monzón, integrante de la Comisión Permanente de Familia del parlamento, comentó que el instrumento legal busca garantizar que todo niño y niña tenga ese derecho:
«Primero como soberanía alimentaria y por la salud del bebé».
Monzón es una de las diputadas más camorristas de la fracción oficialista en la Asamblea Nacional.
Detalló además que las fórmulas lácteas deberán ser suministradas solo en casos puntuales y se estipula igualmente la creación de bancos de leche materna, informó AVN.
«Lo más importante es el amor, la conexión de la madre con el hijo, que a veces se pierde porque no le dan ese calor que implica amamantar al bebé».
La diputada Monzón mencionó que a partir del artículo 26 de la ley se establecen las sanciones y los tipos de prohibiciones, que no existían en las leyes anteriores.
El Gobierno chavista quiere obligar a las madres venezolanas a dar teta a los niños recién nacidos y va a prohibir hasta los biberones.