En las últimas semanas Maduro ha reiterado denuncias de planes de magnicidio, de supuestos mercenarios y paramilitares colombianos y salvadoreños y de diversos planes de golpe de Estado
El gobernante venezolano, Nicolás Maduro, ha acusado al expresidente de Colombia Álvaro Uribe de ser un «asesino» y de dirigir un plan para matarlo, y denunció que paramilitares están intentando entrar en su país con ese fin.
En una alocución televisada:
«Uribe está detrás de un plan para asesinarme. Uribe es un asesino. Yo ya tengo elementos (probatorios) suficientes de que él está conspirando y hay sectores de la derecha venezolana en comunicación con él para eso.»
Maduro precisó que «están tratando de penetrar paramilitares por vía selvática» y que, adicionalmente, «han entrenado gente para esas cosas» en el interior de Venezuela.
Dijo que se han puesto en marcha «medidas especiales de protección, de seguridad» y pidió ayuda a sus seguidores para que colaboren con los organismos del Estado para evitar que esos planes se ejecuten, aunque advirtió que «sería imposible controlar» a civiles y militares venezolanos si resultara afectado.
En las últimas semanas Maduro ha reiterado denuncias de planes de magnicidio, de supuestos mercenarios y paramilitares colombianos y salvadoreños y de diversos planes de golpe de Estado.
El fallecido Hugo Chávez acusó a Uribe en varias ocasiones de planes de magnicidio en su contra durante su mandato, lo que llevó las relaciones bilaterales a periódicas crisis y a la ruptura formal al término de la gestión del ahora exgobernante colombiano.
La respuesta de Uribe
«A la inmadura acusación de la dictadura descabellada por el fraude y la violencia una única respuesta: que se repitan las elecciones presidenciales», ha dicho Uribe a través de su cuenta oficial en la red social Twitter.