El secretario de Comercio Interior de Argentina, Guillermo Moreno, el viceministro de Economía, Axel Kicillof, y el síndico general, Daniel Reposo, se presentaron este 25 de abril de 2013 en la junta anual de accionistas del Grupo Clarín y acusaron a los accionistas de cometer crímenes de lesa Humanidad.
El Estado argentino posee el 9 por ciento de las acciones de la empresa a través de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSeS) tras la nacionalización de Administradora de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP).
Moreno lideró a los altos cargos del Gobierno acompañados de periodistas de la televisión pública y de la agencia oficial de noticias. El Grupo Clarín ha denunciado que posteriormente entraron «por la fuerza» trabajadores de la cadena C5N, afín al Ejecutivo, haciéndose pasar por empleados estatales.
«Filmen a todos lo que están filmando», ordenó Moreno a los periodistas que le acompañaban.
«¡Mirá con lo que nos vamos a quedar!», llegó a comentar Moreno a Kicillof, según las personas presentes citadas por el diario ‘La Nación’.
El secretario de Comercio Interior y el viceministro se sentaron juntos durante la junta.
«Estamos acá, se van a divertir todos», comentó Moreno durante la reunión. Además, el grupo estuvo acompañado por agentes de la Policía Federal que se colocaron en diferentes puntos del edificio en el que se celebraba la junta de accionistas.
La empresa ha denunciado que las fuerzas de seguridad entraron sin ninguna orden judicial.
El secretario de Estado acusó al grupo de «no allanarse a la ley ni a la justicia» y de «apropiarse de (la empresa) Papel Prensa y cómplices de delitos de lesa Humanidad».
El Gobierno ha acusado en varias ocasiones a los dueños del grupo de ser cómplices de los dirigentes de la dictadura argentina (1976-1983) y de conseguir en esa etapa la empresa Papel Prensa, que fue nacionalizada por el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
Reposo acusó al Grupo Clarín de «atentar contra las instituciones» y ha denunciado que los diferentes medios de la empresa han publicado «mentiras» sobre el síndico argentino, encargado de velar porque las medidas del Ejecutivo coincidan con los ingresos del Estado.
Durante la junta, se produjeron algunos momentos de tensión cuando varios accionistas replicaron a Reposo con «burro» e hicieron menciones acerca de las supuestos errores presentes en su currículum acerca de su carrera académica.
Kicillof pidió la renuncia de la junta directiva por no «ganar todo lo que debería» debido a que la empresa no tiene «una administración lo suficientemente profesional».
«No son buenos hombres de negocios».